¡Qué profunda lección de humanidad y qué maravillosa lección de música es contemplar a la maestra Luisa Negri en sus noventa años!
¡Ojalá todos los músicos alcancemos esa venerable edad, pero sobretodo que interioricemos su ejemplo de entrega a la música y a la formación de sus discípulos!
Sea este merecido homenaje a la maestra Luisa Negri la oportunidad para expresarle mi gran admiración como artista, mi profundo respeto por su fecunda labor como forjadora de nuevas generaciones de músicos y mi alegría y agradecimiento por disfrutar de su amistad.
Oswaldo Kuan